5 de febrero de 2011

Borges: Sobre los clásicos laberintos

 Primeras reflexiones:
Moneda Homenaje a Borges (1999)
Quiero leer a Borges. Elijo uno de los cuatro libros, el que está puesto al revés en la biblioteca llama mi atención. Es el tomo II. Empiezo desde atrás, voy pasando las hojas. Leo al azar. Llego a la página 416 y leo: "Laberinto"... «No habrá nunca una puerta...» y pienso: alguna vez escuché una conferencia de derecho en la que afirmaban que, en el laberinto, la forma de "salir" es por arriba o desde arriba...No sé si es así. Borges, con su estética, indica otra cosa sobre el hombre, su destino y la justicia (¿o injusticia?) atroz de la realidad que, con sus mil formas y posibilidades laberínticas, no tiene una salida como tal. Miro el texto de la página 417 y leo otra vez: "El laberinto"... donde dice: «He olvidado los hombres que antes fui; sigo el odiado camino de monótonas paredes que es mi destino...». Plantea paradojas invocando «Rectas galerías que se curvan en círculos secretos al cabo de los años...».
Sigo. Avanzo hacia el principio. Ahora sé que el libro donde leo sobre laberintos es "Elogio de la Sombra", escrito en 1969. Lindo año. Mejor libro.
Recuerdo, la comparación es inevitable: "Elogio de la locura" de Erasmo, "Elogio de la culpa" de Aguinis. Hay otro libro más sobre el "Elogio", que aún no he leído. También es de Aguinis.
Sigo. Avanzo. Llego a la página 182, "Sobre los clásicos". Leo la pregunta del segundo párrafo: «¿Qué es, ahora, un libro clásico?» Y Borges, para responderse, sentencia: "...a mi edad, las coincidencias o novedades, importan menos que lo que uno cree verdadero". ¿Cuál es, entonces, su respuesta? Una síntesis de su pensamiento es el objeto, finalmente, de este minipost.
  • Elemento: Primer estímulo: la "Historia de la literatura china" de Herbert Giles. Su referencia: el "Libro de los cambios" ((ver)). 
  • Afirmación: Dice Borges que deliberadamente eligió un "texto extremo", porque "su lectura reclama un acto de fe". 
  • Definición: Clásico es aquél libro que una nación o un grupo de naciones a lo largo del tiempo han decidido leer como si en sus páginas todo fuera deliberado, fatal, profundo como el cosmos y capaz de interpretaciones sin términos. 
  • Justificación: Borges enlaza los siguientes razonamientos:
  1. hay libros que prometen una larga inmortalidad, pero nada sabemos del porvenir, salvo que diferirá del presente
  2. si el tiempo depara largo tiempo de estudio de un lenguaje (por ejemplo: malayo o húngaro, según los invoca el autor), se encontraría en él todos los alimentos que requiere el espíritu.
  3. la gloria de un poeta depende de la excitación o de la apatía de las generaciones de hombres anónimos que la ponen a prueba, en la soledad de sus bibliotecas.
  4. las emociones que la literatura suscita son -quizás- eternas, pero los medios deben constantemente variar, siquiera de modo levísimo para no perder su virtud.
> los "recursos" literarios se "gastan" (dice Borges) a medida que los reconoce el lector... de allí el peligro de "afirmar" que existen obras clásicas y que lo serán para siempre... sin embargo, creo que el áurea de lo "clásico" le da al texto un valor agregado: el placer de recrear las emociones que, tanto la estética abstracta de su expresión como su lectura concreta, garantizan... distintas según el momento o la necesidad del lector.
  • Síntesis: Clásico es un libro que las generaciones de los hombres, urgidas por diversas razones, leen con previo fervor y con una misteriosa lealtad.
Los libros de Borges en este sentido, creo, son clásicos. ¿Verdad?
Ver, también en reflexiones desde el derecho: "Borges: La muralla y los libros para creer".